En 2015 Estados Unidos recibía el 13,7% de los ingresos producidos por el turismo internacional en todo el mundo. A pesar de no ser el país más visitado ya hace mucho tiempo que es el que tiene mejores números de ingresos. Pero esas cifras vienen en caída ya desde hace algunos años, y todo indica que la política migratoria del actual presidente Donald Trump va a acelerar ese descenso.
Para este año se espera que la participación total de Estados Unidos en el turismo internacional alcance el 11,3%, y siga descendiendo hacia 2022, cuando se estima que ese porcentaje va a ser del 10,9%.
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Una de las explicaciones de esta caída es que Estados Unidos lleva tiempo ya creciendo por debajo de la media mundial del turismo. En 2016 fueron 76,4 millones de visitantes. Este año serán 79,8 millones, y para 2022 se estiman 87,8 millones. Con la excepción de casos puntuales como New York o Miami, la mayor parte de las grandes ciudades estadounidenses no logra atraer un gran volumen de visitantes extranjeros.
Otro punto interesante es que el gasto promedio de los viajeros internacionales está creciendo muy poco año tras año. Este año va a experimentar un crecimiento del 1,9%, pero viene de varios años muy malos: -0,9% en 2016; 0,1% en 2017 y 0,3% en 2018. Sólo para comparar, el gasto de los estadounidenses en turismo en su propio país creció un 2,9% en 2016; 5,2% en 2017; 5,8% en 2018; y 2,9% este año. Es bastante evidente que el país no está logrando que los viajeros extranjeros dejen más dinero en sus viajes, y dependen cada vez más de los viajeros domésticos.
Las perspectivas hacia 2022 son un poco más optimistas, al menos en cuanto a cantidad de viajeros y gasto, pero habrá que esperar si eso se puede concretar. Pueden chequear más números en UsTravel.org.