El breve adiós al metaverso

El breve adiós al metaverso

Cuentan en The Street que Meta se prepara para abandonar su gran proyecto de crear un ecosistema de realidad virtual, el famoso Metaverso. Toda esa plataforma incluye desde visores de realidad virtual, los Quest, hasta software y redes sociales como Horizon. El desarrollo del metaverso estaba requiriendo decenas de miles de millones de dólares por año, sin una perspectiva clara de cuando la compañía podría comenzar a recuperar la inversión.

No habrá anuncio al respecto, pero si comenzamos a ver que desde el próximo trimestre las pérdidas del Reality Labs disminuyen es porque efectivamente están reduciendo el nivel de gasto. También se espera para los próximos días más despidos en Meta, y habrá que estar atento a si estos afectan más a la división de realidad virtual que a otras.

¿Y cuál es el próximo foco de Meta? Obviamente la inteligencia artificial. A partir del éxito de ChatGPT las grandes tecnológicas cambiaron sus prioridades. Google ya tiene su sistema Bard en pruebas y próximo a lanzarse, y Meta no podía estar ausente en este mercado.

Lo que queda en el camino

Para el mercado de viajes el segmento de la realidad virtual siempre fue muy interesante, al menos en las promesas. En abril de 2020, en plena pandemia, marcamos como algunos destinos habían comenzado a explorar la publicación de videos 360 y aplicaciones de realidad virtual para seguir experimentando el viaje a pesar de tener que permanecer en casa por las restricciones al movimiento. Pero la pandemia pasó, y al menos en el segmento del turismo la movilidad ya se parece mucho a la de 2019.

woman in blue denim jacket sitting on brown armchair
Photo by cottonbro studio on Pexels.com

Uno de los problemas de la realidad virtual, al menos en el mercado de viajes, es que siempre fue vista como una versión más económica de un viaje real. Y mucho menos interesante, claro. Otras estrategias no fueron muy utilizadas. Por ejemplo, la de articular los videos 360 y las aplicaciones de realidad virtual con las búsquedas previas antes de un viaje, o con visitar zonas muy específicas de los destinos.

La Realidad Virtual podía aparecer en el mercado de turismo como una forma de visitar lugares que por razones ambientales no pueden recibir muchos turistas. En lugar de arriesgar a estos sitios a una degradación cada vez mayor por la imposibilidad de soportar una mayor carga de visitantes, una posibilidad pasa por crear experiencias más ricas para móviles y visores de realidad virtual.

Los problemas de adopción

El mercado de viajes puede ser muy interesante para el segmento de realidad virtual y la creación de contenidos, pero igual no puede escapar de un problema más general: la falta de adopción masiva de los visores de realidad virtual, como se puede ver en este gráfico de Statista:

Una base instalada de 34 millones de visores de realidad virtual para 2024 no es una cifra tan impactante. Si bien las ventas vienen creciendo año tras año, aún no despegan de manera masiva. Comparado con la comercialización de teléfonos móviles, que alcanzan las 1500 millones de unidades al año, está claro que es un nicho de mercado.

Y estos números pueden terminar siendo optimistas si la empresa que más viene apostando por la Realidad Virtual, en este caso Meta, opta por reducir su gasto en el segmento. Ya en estos días algunos de sus visores bajaron de precio, algo que puede marcar el reconocimiento de que es necesario brindar valores más bajos para estimular la adopción. O, en el peor de los casos, podría ser una búsqueda de reducir los inventarios en dispositivos que la compañía ya no tiene intenciones de renovar.

Las respuestas, en los números del próximo trimestre de Meta, y en los anuncios de despidos en la empresa, y que se esperan para los próximos días.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Volver arriba